Extranjeros en Boedo

Matías Mirabaje: El uruguayo, que hoy milita en el Delhi Dynamos de la Superliga de India, llegó al Ciclón en agosto del 2012 procedente del Montevideo Wanderers. Convirtió tan sólo un gol -a Boca en La Bombonera- y disputó 10 partidos, para después ser cedido a Argentinos Juniors y más adelante al Atlético Paranaense. Eventualmente el volante ofensivo volvió del préstamo y el Patón Bauza lo envió a la División Reserva. Finalmente en enero de 2015 se marchó a Patronato de Paraná.

Luis Aguiar: También uruguayo, arribó a San Lorenzo en julio del 2012 con 26 años desde Peñarol. Recordado por la capacidad de remate con ambas piernas, el volante disputó 14 partidos y convirtió 3 goles pero finalmente terminó siendo separado del plantel por Juan Antonio Pizzi debido a varias discusiones respecto al puesto del jugador en el campo y un viaje sin avisar a Uruguay. Hoy es futbolista de Nacional de Montevideo, y recientemente enfrentó al Ciclón por la Copa Sudamericana 2018.

Martin Cauteruccio: el desembarco del tercer charrúa se produjo en julio de 2013. Caute venía de ser campeón en la B con Quilmes y rindió rápido. Su debut con doblete frente a Olimpo y 5 goles en 6 partidos del Torneo Inicial 2013 le adjudicaron el cariño de la gente con facilidad, hasta que una rotura de ligamentos en la 6ta fecha lo alejó de las canchas hasta mediados del 2014. Fue campeón de América, finalista del Mundial de Clubes para finalmente explotar por decisión de Pablo Guede y continuidad de Diego Aguirre en un nuevo rol, el goleador pasó a ser extremo. Después de tres años y medio en el club, en los que jugó 114 partidos y marcó 42 goles, se marchó a Cruz Azul -en diciembre de 2016- y recientemente arregló su renovación con el club mexicano.

Carlos Valdés: De paso fugaz por el Ciclón, el central de Colombia generó impacto. Llegó del Philadelphia Union de la MLS, fue titular en la Copa Libertadores 2014 precisamente hasta el receso correspondiente a la Copa del Mundo de Brasil que el jugador disputó para su Selección. Después del compromiso internacional, con la semifinal de Libertadores por delante, el zaguero decidió extender sus vacaciones amparado por la FIFA y su inclusión en el Mundial. La dirigencia azulgrana tomó cartas en el asunto y rescindió el préstamo de forma tal que el cafetero, que jugó sólo 14 partidos en el Ciclón, continuara sus vacaciones cuanto quisiera. Hoy es panelista en ESPN FC para la televisión de su país.

Mario Yepes: El defensor colombiano de larga trayectoria en el fútbol europeo, hizo un gran Mundial en Brasil y llegó desde Atalanta como refuerzo de San Lorenzo para el Mundial de Clubes en septiembre de 2014, disputó la final frente al Real Madrid, jugó la Copa Libertadores 2015 de la que quedó afuera en primera fase y mediante el subcampeonato en el campeonato local alcanzó la clasificación a la edición del año siguiente. Una vez finalizado su vínculo con el club, en el que jugó 39 encuentros, anunció su retiro en enero de 2016 para convertirse en entrenador. Desde 2017 se encuentra sin club.

Álvaro Montero: En 2015 San Lorenzo buscaba arquero para relevar a Sebastián Torrico, tras el retiro de Leo Franco y la partida de Cristian Álvarez, y la opción llegó desde Sao Caetano. Montero había sido el arquero titular de la Selección Sub 20 de Colombia y estaba en la más alta consideración de figuras como Iván Córdoba. Llegó en julio y no consiguió atajar más que en la Reserva comandada por el Pampa Biaggio. Rescindió su contrato en octubre de 2016 sin disputar ningún encuentro en Primera. Hoy milita en el Deportes Tolima en su tierra natal.

Pedro Franco: Del mismo modo que su compatriota Montero, el zaguero arribó al club de Boedo por recomendación de Iván Córdoba y del propio Mario Yepes en enero de 2016, a préstamo por seis meses, desde el Besiktas de Turquía con el objetivo de reforzar el equipo de Pablo Guede. La presencia de Marcos Angeleri, Matías Caruzzo y eventualmente de Paulo Díaz, sumado a un estado físico y futbolístico pobres, lo relegaron y terminó su préstamo con 4 partidos disputados. Hoy es futbolista del América de Cali en la Primera A de Colombia.

Paulo Díaz: Por pedido expreso de Pablo Guede, que ya lo había dirigido en Palestino, el chileno llegó a San Lorenzo en enero de 2016 tras un breve paso por Colo Colo. Paradójicamente no fue tenido en cuenta por Guede durante la mayoría de los encuentros pero más adelante, gracias a su capacidad polifuncional, se ganó un lugar en la consideración de Diego Aguirre. Primero como lateral, incluso en el izquierdo siendo diestro, y en su última etapa como central se afianzó como titular con la azulgrana. Complementó su labor en defensa con algunos goles de cabeza y cerró su paso por el Ciclón con 68 partidos disputados y 8 goles, para reunirse en agosto de 2018 con Pablo Guede en el Al-Ahli de Arabia Saudita.

Mathias Corujo: En julio de 2016, Diego Aguirre solicitó como refuerzo al defensor uruguayo que vino a San Lorenzo desde la Universidad de Chile con la difícil misión de hacerse dueño del lateral derecho. Con 30 años y siendo un conocido del entrenador por coincidencia en Montevideo Wanderers y Peñarol, estaba todo dado para que Chiche alcanzara su objetivo. Finalmente su nivel no fue el esperado por lo que Corujo, tras 21 partidos con la azulgrana, terminó rescindiendo su contrato en agosto de 2017 para incorporarse a Peñarol. En mayo de este año se rompió los ligamentos, se perdió el Mundial de Rusia -era nombre seguro para la Celeste- y volverá a las canchas recién en 2019.

Robert Piris Da Motta: El volante paraguayo pasó a San Lorenzo desde Rubio Ñu en enero de 2017, completó la pretemporada y debutó en lugar de Franco Mussis en abril de ese mismo año pero cuando el partido llevaba tan sólo 18 minutos, Piris se tuvo que retirar por un desgarro. Su regreso se produjo recién en septiembre, nuevamente para reemplazar a Mussis, y se ganó su lugar a fuerza de garra siendo una de las figuras del equipo de Claudio Biaggio durante los 25 partidos que disputó con la camiseta azulgrana. Con presente de Selección en 2018, Piris Da Motta se marchó repentinamente a pocos días del comienzo de la Superliga al Flamengo.

Daniel Hernández: Apodado como “El Travieso”, el colombiano de 28 años llegó desde el Rionegro Águilas en el último mercado de pases. Los hinchas de San Lorenzo sólo vieron dos presentaciones de Hernández, un puñado de minutos frente a Patronato en los que asistió a Franco Mussis para un gol soñado y otro poco frente a San Martín de San Juan donde pudo convertir un tanto. 54 minutos son los que jugó y eso será todo, ya que Jorge Almirón no lo tendrá en cuenta para el 2019.

Gustavo Torres: El delantero colombiano llega a San Lorenzo para arrancar la pretemporada a las ordenes de Jorge Almirón, quien fue su entrenador en su última experiencia en Atlético Nacional.

Con la incorporación de Loaiza en las próximas horas y Trauco en carpeta esta lista se podría extender en forma llamativa. El fútbol del Ciclón en el 2019 se nutrirá de talentos de varios rincones para intentar ser campeón de América.