San Lorenzo, #QuedateEnCasa entrenando...

Por la pandemia del coronavirus, todos debimos cambiar nuestra rutina en mayor o menor medida, sobre todo tras la cuarentena obligatoria que el Poder Ejecutivo decretó desde el primer minuto del viernes pasado. En este panorama, el fútbol argentino no fue la excepción y tuvo que adaptarse: los jugadores, por ejemplo a entrenar desde sus casas y tener contacto con los distintos cuerpos técnicos de forma remota, ya sea mediante llamados o a través de mensajes de Whatsapp.

Por eso, el plantel que lidera Soso (que tuvo solo dos prácticas presenciales ante sus dirigidos) tiene una rutina adaptada perfectamente a los horarios que tenían cuando entrenaban en Ciudad Deportiva. Entre las 8 y las 8.30, los futbolistas deben realizar el desayuno, el mismo debe contar con mayoría de hidratos de carbono (pan, granola, queso untable, mermelada, miel, etc.), y deben acompañarse con alguna infusión y una fruta, para reforzar el sistema inmunológico. A las 9 arranca la actividad física, con ejercicios de activación general, y posteriormente, de forma focalizada: zona media, tobillos, cuádriceps, etc. Luego, será el turno de los trabajos aeróbicos y de fuerza, para terminar con unos minutos de elongación. El tema alimentación es fundamental: se aconseja con énfasis respetar las cuatro comidas diarias y que el hecho de estar en casa no lleve a ningún jugador a “picotear”. Además, se les pide consumir vegetales crudos o cocidos, frutas y con una hidratación adecuada.

Desde lo táctico-técnico, Soso estableció un sistema para hacerle llegar conceptos a los futbolistas. Entre las 11 y las 13.30, un miembro del cuerpo técnico conversa con los futbolistas, además de recibir un video de acciones individuales y colectivas del equipo. Todo esto, supervisado por la Secretaría Técnica a cargo de Hugo Tocalli, Leandro Romagnoli y el Beto Acosta, quienes reciben partes permanentes.