Estuvo cerca del milagro pero se le escapó como agua entre los dedos

San Lorenzo quedó prácticamente eliminado de la Copa Libertadores de América al caer 2 a 1 frente al Toluca en México. El Ciclón lo ganaba desde la primera mitad con un gol de Blandi. Pero a falta de diez minutos para el cierre del encuentro, Uribe facturó por duplicado y desencadenó una segura y prematura salida del equipo de Guede del torneo más importante del continente. Aunque queda una ínfima luz de posibilidad, depende de un milagro. Ahora, a poner todas las fichas en el campeonato local…

San Lorenzo se la había rebuscado bastante para soportar el asedio de Toluca, no sólo en la primera mitad, también en casi todo el complemento. Un par de tiros en los postes, salvadas providenciales de Torrico, despejes de Caruzzo y Angeleri, hasta un cierre de Mas eran antecedentes más que necesarios para corroborar los merecimientos de los mexicanos para alzarse con –al menos- un empate.

Sin embargo, la ventaja en el capítulo inicial tras el gol de Blandi, no se pudo sostener y Toluca aprovechó esa ráfaga final y se quedó con todo el botín. Restaban apenas poco más de 10 minutos para el desenlace y no era utópico pensar en quedarse en el bolsillo con los tres porotos. Paradójicamente cuando San Lorenzo lo tenía controlado, los “Diablos Rojos” golpearon y noquearon al Ciclón. Primero fue Uribe quien recibió un centro desde la izquierda, saltó entre los centrales azulgranas y con un golpe de espalda poco convencional la acomodó para hacer estéril el vuelo de Torrico y decretar la igualdad transitoria. El empate no le servía a San Lorenzo y Guede mandó a todo el equipo al ataque. Y lo pagó caro, de hecho, se quedó afuera de la Copa. Decía que el Ciclón había adelantado sus líneas con la intención de lograr un resultado que le dejara otro sabor de cara a lo que estaba por venir. No obstante, en otra contra, Uribe golpeó de nuevo. Fue el 2-1 para el Toluca que también podía haber finalizado en empate si Matos o Villalba hubieran estado más finos en sendas definiciones.

Personalmente considero que se acabó lo que se daba, cuervos, la ilusión llegó a su fin porque la realidad llamó a la puerta. Esta fase de grupos venció esta noche en Toluca, pero empezó malparida desde el sorteo. No por nada, al 6 se lo denominó “El grupo de la muerte” desde el vamos. Mientras los equipos argentinos ganan, empatan o pierden pero sacan cuentas y aventuran contra quién jugarán en octavos de final, San Lorenzo jamás pudo sumar de a 3. Cayó en Quito sin atenuantes, y repartió puntos en casa ante el propio Toluca y –de manera insólita- ante Gremio. A pesar de lo que indiquen las matemáticas, San Lorenzo quedó afuera de la Copa, pero no fue hoy cuando data su fecha de defunción. Partido a partido fue perdiendo parte de su clasificación y hoy terminó de sellar su suerte, o mejor dicho, su desgracia.